Carta abierta de la sociedad civil a los/as ministros/as de Transporte de los Estados miembro y al Parlamento Europeo instándoles a rechazar la creación de demanda adicional de gas natural en el transporte en el Reglamento de Infraestructura de Combustibles Alternativos (AFIR)

25 de mayo de 2022-. A medida que avanzan las negociaciones sobre la propuesta de la Comisión Europea de un Reglamento de (AFIR), el Parlamento Europeo ha introducido muchas enmiendas para incluir más gasolineras como parte de la revisión de la legislación. ECODES y diversos representantes de la sociedad civil suscriben esta carta para instar a los responsables de la toma de decisiones a rechazar la creación de una demanda adicional de gas natural en el transporte. La invasión rusa de Ucrania ha demostrado que nuestra dependencia de las importaciones de combustibles fósiles no es sólo una amenaza para nuestros objetivos climáticos, sino también una grave vulnerabilidad en materia de seguridad energética. No podemos agravar estos retos.

Dependencia del gas ruso - Europa depende en gran medida del gas ruso. Más del 40% del suministro de gas natural europeo son importaciones rusas, que históricamente se han usado en los sectores de la calefacción y la electricidad. A pesar de estos antecedentes, los defensores del gas natural en el transporte han reforzado sus llamamientos para aumentar nuestra dependencia de las importaciones de gas fósil promoviendo el gas como solución "limpia" para el transporte por carretera. Cuando esto es una mentira. El gas no es un combustible limpio. A pesar de ello, la Comisión Europea espera que aumente el número de camiones propulsados por gas. Su propuesta prevé un crecimiento de 510.000 camiones a gas para 2030, lo que supondrá un aumento en el consumo de 18,5 millones de toneladas de gas al año. Si estos planes se realizan, para 2030 su uso en el sector del transporte por carretera y el transporte marítimo equivaldrá al 26% de todas las importaciones de gas de Rusia de 2021.

El gas natural es un combustible fósil - Las fugas de metano y el deslizamiento causan un fuerte efecto invernadero y socavan cualquier ventaja climática sobre la gasolina y el gasóleo. El biometano se presenta como como una solución para estas deficiencias, a pesar de la falta de escalabilidad para la producción y una escala que ni siquiera es suficiente para los sectores con mayor demanda de gas natural existente. No hay justificación para consumir recursos limitados en el sector transporte, especialmente mientras los sectores europeos de la electricidad y la calefacción siguen siendo muy dependientes del gas.

El gas contamina el aire que respiramos - Estudios independientes han demostrado la existencia de importantes emisiones de partículas de los camiones de gas, que pueden ser mayores que las de los camiones diésel. Además, los camiones a gas emiten cantidades excesivas de partículas muy pequeñas que pruebas recientes sugieren cada vez más que son las más perjudiciales para la salud humana.

La reducción de nuestra dependencia de todos los gases fósiles y rusos será una tarea difícil, pero ya existen otras tecnologías, como los camiones eléctricos. No podemos dificultar esa tarea aumentando significativamente nuestro consumo de gas en los medios de transporte que pueden ser electrificados. Esto supondría un reto tanto para la seguridad energética europea como para el clima y, por ende, los acuerdos y compromisos climaticos, ambientales, economicos y sociales adoptados. 

   

Resumen sobre AFIR [EN]

   

Carta de la sociedad civil [EN]

   

Más información:

Cristian Quílez
Responsable de Proyectos | Project Manager
Área de Políticas Públicas y Gobernanza Climática
cristian.quilez@ecodes.org

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