Reclamamos el derecho a una energía limpia y asequible

Cientos de organizaciones, activistas de base y responsables políticos -entre ellos, ECODES- nos reuniremos la próxima semana en el Right to Energy Forum, el mayor evento anual sobre pobreza energética en Europa, para recopilar ideas, compartir experiencias y crear oportunidades para erradicar un problema que vemos cada vez más presente. La urgencia de la situación, agudizada por la crisis del precio del gas y una creciente impaciencia con las medidas adoptadas hasta ahora, ha empoderado a muchos para pedir más a un sistema energético que les está fallando.
Europa se enfrenta a un "invierno de desconexiones", el peor jamás registrado. Pero incluso antes de que la crisis de los precios de la energía comenzara a aparecer en los titulares, más de 50 millones de europeos ya se vieron obligados a elegir entre calentar su hogar y comer. La pobreza energética es una desigualdad estructural, causada por viviendas ineficientes e inseguras y un sistema energético injusto, centrado en sus fines lucrativos. Solo en Francia, 12 millones de personas viven en casas obsoletas e inseguras. Tomemos, por ejemplo, a Zohra, que compró una casa en Marsella que estaba mal aislada y era imposible mantener a una temperatura adecuada debido a sus ventanas, por las que entraban una gran cantidad de aire. La única solución, la rehabilitación, parecía inalcanzable sin ni apoyo del gobierno.
Uno de cada cuatro hogares europeos lucha por iluminar, calentar o enfriar adecuadamente sus hogares. La crisis del precio del gas de este invierno ha puesto la pobreza energética en el centro de atención, pero los líderes de la UE no han podido ponerse de acuerdo sobre una respuesta y hasta ahora solo han ofrecido apoyo temporal a los ingresos para los hogares más vulnerables. Pero mientras luchan por encontrar soluciones a corto plazo, las organizaciones de base nos hemos estado organizando y brindando ayuda durante décadas.
En ECODES llevamos años ayudando a hogares en situación de vulnerabilidad a mejorar sus condiciones de vida desde diferentes frentes. Desde 2013 desarrollamos el programa Ni un hogar sin energía, que asesora a familias sobre sus hábitos energéticos, les dota con equipos más eficientes y les ayuda a realizar mejoras en sus viviendas para mejorar su eficiencia energética. También llevamos tiempo reuniéndonos con nuestros responsables políticos para que tengan en mente la situación de la población vulnerable y puedan desarrollar medidas que mejoren sus condiciones de vida.
Otro ejemplo de acción puede ser el realizado por la Aliança contra la Pobreça Energética (APE), una organización de base que desafía el sistema energético dominante y aborda las causas profundas de la pobreza energética. Su trabajo en Cataluña representa un caso de éxito y condujo a un cambio político sustancial en 2015 cuando el parlamento autonómico prohibió las desconexiones de electricidad para hogares en situación de vulnerabilidad. En 2021, APE lideró una campaña que liberó a 35.000 familias de sus deudas energéticas. Su movilización también llevó a la ciudad de Barcelona a establecer centros de asesoramiento y lanzar una campaña pública para informar a las personas sobre sus derechos.
este ejemplo demuestra cómo es posible garantizar colectivamente que el derecho a la energía se convierta en un derecho humano en toda Europa y desafiar a las empresas energéticas que aún logran generar ganancias extraordinarias en medio de una crisis humana. La investigación realizada por Global Witness revela cómo los mayores productores de gas obtienen ganancias, mientras millones de personas luchan por calentar sus hogares y cocinar sus alimentos, atrapadas en una combinación tóxica de dependencia de los combustibles fósiles y codicia corporativa que les está fallando a todos excepto a los gigantes de los combustibles fósiles y sus patrocinadores.
El contraste entre un "invierno de desconexiones" y las ganancias récord que se están generando gracias a la volatilidad de los precios de Europa, indica la necesidad de un sistema energético que anteponga a las personas y el planeta a las ganancias. Están surgiendo movimientos e iniciativas solidarias de diferentes formas, desde sindicatos que exigen el fin del modelo de mercado fallido hasta comunidades emergentes de energías renovables.
Este año podría ser un año tremendo para la eficiencia energética, alejándose de los combustibles fósiles y brindando programas renovables y de renovación profunda que permitirán a los hogares pobres en energía reducir sus facturas de energía y emisiones de carbono. La UE prometió un Acuerdo Verde que no deje a nadie atrás, pero hasta ahora Europa no está cumpliendo ni de cerca con su promesa.
A medida que los movimientos se movilizan y cobran impulso durante la mayor crisis energética de Europa hasta la fecha, el Right to Energy Forum ofrece un espacio para que los organizadores de base, los activistas, los proveedores de servicios y cualquier persona interesada en el tema se reúnan, compartan habilidades y experiencias, y exploren oportunidades para influir en los responsables políticos. Es hora de descarbonizar las viviendas de Europa, liberarnos de los combustibles fósiles y ganar una transición energética para todos.