Fuente: Heraldo de Aragón
J. J. VERÓN. Zaragoza | El pasado año hidrológico ha dejado tal escasez de precipitaciones que en algunos puntos de Aragón ha llovido menos que en el desierto de Arizona (Estados Unidos) y sólo un poco más que en determinadas partes del desierto del Sahara. Con registros de menos de 250 litros por metro cuadrado en doce meses, el Bajo Aragón, Monegros y la mayoría del Valle del Ebro están en la actualidad por debajo de los valores que los expertos utilizan para distinguir si una zona es o no desierto.
En Arizona llueve una media anual de entre 250 y 300 litros por metro cuadrado, mientras que en el Sáhara las precipitaciones medias máximas están en 130 litros anuales. En Fabara, este año hidrológico (de septiembre a septiembre) se han recogido sólo 204 litros, según los datos de la Oficina del Regante del Gobierno de Aragón, que cuenta con una amplia red de estaciones meteorológicas en las principales zonas agrícolas de la Comunidad.
Los expertos sitúan el límite de precipitaciones de las zonas desérticas en 250 litros por metro cuadrado al año. En el pasado curso estuvieron por debajo de estas cifras localidades como Alcañiz (238), Caspe (224), Fraga (230), Híjar (216), Huerto (228), Lanaja (247), Zaragoza (229), Quinto (226) o Tamarite de Litera (233). Otros municipios se han quedado rozando esta cifra como Barbastro (256), Grañén (266), Patriz (265), Sariñena (254) o Zaidín (250), siempre segun los datos del Departamento de Agricultura.
Estas cifras son extremadamente bajas y más si se tiene en cuenta que la parte central de Aragón cuenta con algunas de las precipitaciones medias más bajas de España en años normales: Gallur 350 litros por metros cuadrado; Alcañiz, 388; Calatayud, 421; Zaragoza, 314; Fraga, 346 o Caspe, 325, según las estadísticas del libro El clima en Aragón, escrito por el profesor de la Universidad de Zaragoza José María Cuadrat para la colección CAI 100.
La lluvia ha sido este año entre un 30 % y un 40 % menor de lo que es habitual, según los datos de la Oficina del Regante. Algunos ejemplos así lo demuestran. En Alcañiz, la precipitación media anual es de 383 litros por metro cuadrado, frente a los 238 de este año (un 39 % menos); en Caspe se han registrado 267 litros frente a los 325 de media (un 32 % menos); en Fraga han caído 230 litros frente a 347 (34 % menos); en Huesca han sido 320 frente a 587 (45 % menos); en Sariñena, 254 frente a 468 (46 % menos) y en Tamarite de Litera, 233 frente a 389 (41 % menos). Estos porcentajes de reducción de lluvias son similares en el Pirineo, aunque en este caso se parte de valores medios que se acercan a los 1.000 litros anuales por metro cuadrado.
Distribución irregular
Además de la escasa precipitación del pasado año hidrológico, los datos de la Oficina del Regante de la DGA ponen de manifiesto la pésima distribución de las lluvias, lo que ha contribuido a agravar todavía más los efectos de la sequía. Como se puede comprobar en el gráfico de esta página, los meses de invierno y comienzo de primavera fueron muy secos dentro del conjunto del año, pero mucho más si se comparan con las precipitaciones medias esa época del año.
Los mismos datos reflejan periodos muy secos, que en algunos puntos se tradujeron con espacios de tiempo superiores a un mes sin haber recibido ni una gota de lluvia. Estos periodos se produjeron durante el invierno y se han reproducido en el verano.
Hasta la semana pasada, en los últimos cuatro meses del año hidrológico, se habían registrado 44 litros por metro cuadrado en Daroca, 25 en El Bayo, 43 en Monreal del Campo y 62 en Osera de Ebro y Villarquemado. Las cifras del conjunto del verano también son dramáticas en Sodeto (17 litros por metro cuadrado) o Tauste (23).