La Comisión Europea ha instado a España a que cumpla la legislación de la Unión en materia de aguas y a que presente sus planes hidrológicos de cuenca, que son esenciales para alcanzar el objetivo de la UE de un buen estado de las aguas europeas para 2015. Estos planes debería haber sido adoptados antes del 22 de diciembre de 2009 y su retraso podría impedir conseguir la calidad necesaria del agua por lo que se ha remitido a España a un dictamen motivado. De no recibirse una respuesta satisfactoria en el plazo de dos meses, la Comisión puede llevar a España ante el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas.
Fuente: euroalert.net
La Directiva 2000/60/CE que establece el marco comunitario de actuación en el ámbito de la política de aguas constituye el instrumento fundamental para preservar la calidad de las aguas en Europa y alcanzar el objetivo de la UE de un buen estado de las aguas europeas para 2015. Esta Directiva por la que se establecía la política europea de aguas, impuso a los Estados miembros la obligación de publicar un plan de gestión de cada demarcación hidrográfica como mínimo nueve años después de la entrada en vigor de la Directiva.
La Directiva Marco del agua exigía además a los Estados miembros que realizaran una consultar dirigida a la población y a otras partes interesadas acerca de estos planes y que hicieran públicos los borradores de los mismos, dejando un margen de seis meses para recibir observaciones por escrito. Según estos requisitos, las consultas públicas debían haber empezado a más tardar en diciembre de 2008. Como consecuencia del incumplimiento de estas obligaciones, la Comisión Europea ya apercibió en junio de 2010 a doce estados miembros, entre los que se encontraba España, por no presentar oportunamente sus planes hidrológicos de cuencas.
En el caso español, únicamente se ha presentado el plan correspondiente al distrito de cuenca fluvial de Cataluña, de manera que los ciudadanos aún no saben cómo se van a gestionar sus recursos hídricos. De hecho, y según señala la Comisión, el retraso en la presentación de los planes hidrológicos de cuenca pone en peligro el cumplimiento del objetivo de la Directiva.
Nuevos retrasos tendrían graves repercusiones sobre el cumplimiento global de la Directiva, la adopción de medidas y, en definitiva, la mejora del medio acuático. Puesto que para España siguen faltando los planes correspondientes a las otras 24 demarcaciones hidrográficas, la Comisión ha remitido un dictamen motivado a España, mediante el cual urge a agilizar sus procedimientos con vistas a la adopción de los planes. España tiene dos meses para darle cumplimiento.