Los productos industriales intermedios -como el cemento, el acero, el aluminio y los plásticos- representan los componentes básicos de la producción moderna. Al mismo tiempo, se espera que sean responsables de una cuarta parte de las emisiones de GEI para 2050 en Europa. De hecho, ya en actualidad, las emisiones relacionadas solo con el cemento y el acero representan, respectivamente, el 8% y el 5% de las emisiones totales de GEI de la UE.
Por otro lado, la contaminación atmosférica emitida por los grandes centros de fabricación industrial en Europa cuesta a la sociedad entre 277 000 y 433 000 millones de euros al año (alrededor del 2-3 % del PIB de la UE en 2017), y la mayor parte procede de procesos intensivos en energía que implican combustión (hierro y acero, vidrio, procesos de combustión, cemento, etc.).
Por esta razón, el compromiso de Europa hacia la neutralidad de carbono para 2050 y la ambición de contaminación cero del Pacto Verde de la UE no tendrán éxito sin esfuerzos concertados hacia un enfoque integrado sobre la descarbonización y la prevención de la contaminación de los procesos de fabricación de cemento y acero.
Los planteamientos existentes han demostrado claras limitaciones. Aunque estos sectores están cubiertos por el Régimen Comunitario de Comercio de Derechos de Emisión (RCCDE) y el Mecanismo de Ajuste en la Frontera del Carbono (CBAM - cuyo impacto aún se desconoce en gran medida), hasta ahora los esfuerzos se han visto obstaculizados. Las medidas actuales pueden parecer más motivadas por la intención de proteger la industria de la UE que por la necesaria aceleración hacia la descarbonización. Además, no solo las políticas industriales y de productos aún no establecen límites de emisión de GEI como lo hacen para otros contaminantes, sino que los documentos BREF (documentos de referencia sobre las mejores técnicas disponibles) pertinentes también están muy desfasados para sectores clave: Hierro y Acero (2012); Cemento, Cal y Magnesia (2013).
En general, no hay impulsores de mercado fuertes para acelerar y asegurar las inversiones hacia la descarbonización de estos sectores a nivel de la UE. Junto con la incertidumbre vinculada a Covid19, a la invasión rusa de Ucrania y a una incipiente recesión económica, existe un claro desafío para que surjan soluciones alternativas a escala en estos sectores y se garantice que la descarbonización de los productos intermedios se está produciendo al ritmo necesario.
Nuestro objetivo final es conseguir una industria cementera y siderúrgica de la UE reforzada y descarbonizada. Creemos que la creación de mercados y de certidumbres a largo plazo para la adopción de productos descarbonizados es la forma más eficaz de activar las inversiones en descarbonización y mantener una industria fuerte en la UE, al tiempo que inspiramos -y nos inspiran- las experiencias a escala mundial.
Para la realización de este proyecto contamos con European Environmental Bureau y otros colaboradores nacionales a nivel europeo: INCIEN (República Checa), Natuur & Milieu (Países Bajos) y Energy Policy Group (EPG) (Rumanía), bajo la financiación de ClimateWorks Foundation.