Estamos inmersos en una crisis mundial, donde se están solapando tres emergencias. La sanitaria provocada por la COVID-19, la económica derivada de la primera, y la climática. Sus impactos están siendo inmediatos en lo sanitario, casi inmediatos, pero con mayor duración en lo económico, y crecientes y de mayor alcance en el clima.

Desde ECODES partimos de una máxima que creemos debe guiar las acciones del presente y la construcción del futuro: No sería lícito que con nuestras inversiones generemos deudas que pagarán en su mayoría nuestros descendientes, si no les garantizamos un planeta más sano en el que vivir.

Zaragoza debe examinar cuál es su cuota de responsabilidad en esa enorme tarea: contribuyendo a construir una economía baja en carbono, circular e inclusiva para todas las personas. 

En la deseada salida de las actuales crisis, esta es sin duda la mejor ruta para una recuperación económica y del empleo más sólida, más justa y más resiliente. Y sobre todo justa con las futuras generaciones.

Las propuestas de ECODES están orientadas, además, a lograr avanzar en la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), el Acuerdo de París y la Nueva Agenda Urbana 2030. La Humanidad acordó un Programa Común para el año 2030 y cada ciudad tiene que hacer su parte para lograr esta meta. El plan de futuro debería alinearse con el objetivo ampliado del 55% en la reducción de emisiones para 2030, por la Unión Europea, y sentar las bases para la descarbonización en 2050.

Es un documento abierto, que iremos mejorado y enriqueciendo con las aportaciones que recibamos a través del correo electrónico ecodes@ecodes.org