Ni Un Hogar sin Energía, en colaboración con el  Gobierno de Aragón, lleva desde el 2017 desarrollando un programa para reducir la pobreza energética basado en la colaboración con los servicios sociales comarcales, el uso de  herramientas digitales y el acompañamiento hasta el  final en las gestiones para tramitar el bono social.

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Ni Un Hogar Sin Energía, el programa de ECODES para reducir la pobreza energética, tiene en marcha un servicio de Puntos de Asesoramiento Energético para atender a los hogares del medio rural con el apoyo del Gobierno de Aragón a través del IASS, Instituto Aragonés de Servicios Sociales. El servicio tiene como objetivo disminuir las facturas de luz y gas y mejorar el confort de los hogares en situación de vulnerabilidad,  mediante la  optimización de  su contrato de energía, la solicitud del bono social, la recomendación de  hábitos de ahorro de energía y de medidas de micro-eficiencia energética en sus viviendas.  

Nuestra metodología se basa en varios puntos clave:

En primer lugar, la estrecha colaboración con los servicios sociales comarcales para la difusión de los puntos de asesoramiento entre la población, así como la detección y  derivación  de hogares en situación o riesgo de pobreza energética que puedan necesitarlo, dando prioridad a los casos en los que la familia ha recibido un aviso de corte de suministro o hay dificultades para el pago de sus facturas. Además, formamos a las trabajadoras sociales en bono social y les prestamos asistencia técnica continua en la resolución de dudas relacionadas con los trámites para solicitarlo y las dudas en las facturas de energía de sus usuarios 

Otro de los puntos clave es la itinerancia y las diferentes modalidades para llegar a todo el territorio, especialmente la rural. Los puntos de asesoramiento se desarrollan de manera presencial en las Comarcas de Aragón en las que los servicios sociales  lo solicitan.  La atención presencial se realiza con la frecuencia necesaria para atender la demanda de personas que necesitan el  servicio, acordando las fechas de atención previamente con los servicios sociales locales. De igual modo, en el caso de que la demanda del servicio no sea suficiente para poder desplazarnos, se atiende de manera telefónica, para poder llegar a toda la población rural aragonesa, independientemente del lugar de residencia.   

En el desarrollo de los puntos de asesoramiento también es esencial el uso de nuestra herramienta online, ENERSOC, para el diagnóstico socio-energético del hogar en combinación con la revisión de sus facturas de energía. La herramienta nos permite tener una imagen general de su situación socioeconómica, su vivienda, sus equipos eléctricos y de calefacción, su consumo y su potencia contratada. A partir de este diagnóstico, la herramienta, de forma automática e instantánea genera un informe de recomendaciones personalizado sobre la posibilidad de ser beneficiario del bono social, la optimización de su contrato de energía,  hábitos de ahorro de energía y medidas de eficiencia energética. Tras la cita, si el informe de recomendaciones indica que se puede solicitar el bono social o son necesarias gestiones para la optimización de la factura, desde ECODES les acompañamos y apoyamos en la tramitación para garantizar que las recomendaciones efectivamente se apliquen. El diagnóstico energético también nos permite detectar tanto consumos excesivos, por ejemplo, por equipos antiguos o ineficientes, como infra consumos por miedo a las facturas que hacen que las familias tengan temperaturas inadecuadas en sus hogares.

El éxito del servicio de los puntos de asesoramiento energético en  Aragón es la colaboración y confianza mutua con el personal de la administración y los servicios sociales, el uso de herramientas digitales para el diagnóstico energético y seguimiento de las gestiones, la flexibilidad de la atención presencial y on-line a demanda y la capilaridad en todo el territorio rural aragonés para garantizar que todas las familias estén atendidas. Además, la continuidad gracias a la colaboración del Gobierno de Aragón ha permitido una mejora continua, un aprendizaje mutuo y un conocimiento del servicio por parte de la población que nos ha permitido ayudar a casi 2.400  hogares en situación de pobreza energética  desde que se puso en marcha en 2017.

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