Según las Naciones Unidas, el agua está en el epicentro del desarrollo sostenible y es fundamental para el desarrollo socioeconómico, la energía, la producción de alimentos, los ecosistemas y para la supervivencia de los seres humanos. El agua también forma parte crucial de la adaptación al cambio climático, y es un decisivo vínculo entre la sociedad y el medioambiente. El agua es, además, una cuestión de derechos. A medida que crece la población mundial se genera una necesidad creciente de conciliar la competencia entre las demandas comerciales de los recursos hídricos para que las comunidades tengan lo suficiente para satisfacer sus necesidades. Merece la pena destacar que las mujeres y las niñas deben tener acceso a instalaciones de saneamiento limpias que respeten su privacidad para cuidar de su menstruación y para que tengan una maternidad digna y segura. El desarrollo del ser humano requiere que el agua y los sistemas de saneamiento se lleven a cabo de forma separada. Ambos son vitales para reducir el número de enfermedades y para mejorar la salud, la educación y la productividad económica de las poblaciones.
A través del proyecto "Proyectando alternativas sostenibles de acceso al agua en comunidades rurales de León, Nicaragua", financiado por el Ayuntamiento de Zaragoza, se ha conseguido mejorar la calidad de vida de las comunidades rurales de Talchocote y Las Chácaras (León, Nicaragua), a través de la proyección de un sistema sostenible de agua y saneamiento, teniendo en cuenta que actualmente las comunidades no cuentan con acueductos.
El proyecto ha incluido una fase de estudio y diagnóstico del sistema actual artesanal de agua y saneamiento de las comunidades. El diagnóstico es esencial para analizar las proyecciones futuras en las redes de conducción y distribución, determinar el tipo de caudal que se necesita para abastecer a toda la población y localizar las actuales fuentes hídricas de manera que se abran las puertas a la construcción de un acueducto. Además, el proyecto ha fortalecido las capacidades de los integrantes del Comité de Agua y Saneamiento (CAPS) de las comunidades de Talchocote y Las Chácaras en administración, operación, mantenimiento y manejo del sistema de agua, de tal forma que la propia comunidad pueda garantizar la sostenibilidad del sistema.