Las reclamaciones pueden ser una llamada a las compañías para que utilicen la publicidad de forma legal, veraz y responsable

En el año 2009, el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Autocontrol y varias empresas energéticas y de automoción firmaron un acuerdo para velar por el buen uso de argumentos ambientales en publicidad y establecer mecanismos de denuncia en caso de mala praxis. La realidad es que 12 años después de su publicación, apenas se presentan denuncias en Autocontrol en relación a este asunto.

Las reclamaciones pueden ser un toque de atención a las compañías, para animarles así a que utilicen la publicidad de forma legal, veraz y responsable. Una práctica en la que los consumidores a título individual podemos aportar, ya que existe un canal de denuncia a través de la web de Autocontrol.

A continuación, enumeramos algunos de los compromisos que aparecen en este “Código de autorregulación sobre argumentos ambientales en comunicaciones comerciales”, incluyendo algún ejemplo de incumplimiento. Aunque se exponen ejemplos de distintos sectores, el código fue impulsado por empresas energéticas y de automoción. Por ello, las reclamaciones relacionadas con otros sectores se rigen por el código general de publicidad, en el que el 14 ahonda en la “publicidad engañosa”. En este epígrafe se pueden incluir todas aquellas prácticas que inducen a error a la ciudadanía.

Principios y normas del código sobre argumentos ambientales

Norma 4: “Las comunicaciones comerciales no deberán mostrar comportamientos perjudiciales para el medio ambiente, a no ser que su exhibición tenga un motivo educativo o demostrativo proambiental, ni deberán incitar a llevar a cabo tales comportamientos”

¿Has visto algún anuncio que incumpla esta norma?

  • La publicidad de tarifas planas de electricidad con el mensaje de que el consumidor paga lo mismo independientemente de su gasto promueve una falta de control sobre el consumo energético que no es beneficiosa en el contexto de emergencia climática actual.
  • Los anuncios de coches que presentan una conducción en entornos urbanos idílica, sin atascos, sin problemas de aparcamiento, sin ruidos, incitan a la utilización del vehículo privado para todos los desplazamientos.

Norma 5: “Las comunicaciones comerciales deben ser veraces. Por consiguiente, no deben ser susceptibles de inducir a error a los destinatarios de las mismas, en particular, sobre los aspectos ambientales o ventajas de tipo ambiental de los productos, ni sobre las acciones que esté llevando a cabo el anunciante en beneficio del medio ambiente.”

¿Se te ocurre algún anuncio que no cumpla con este principio?

  • En algunos anuncios se dan contradicciones entre la locución y la letra pequeña. Un ejemplo: cuando se habla de contenido de productos biodegradables en publicidad de productos de higiene personal.
  • En muchos anuncios de compañías energéticas también se induce a error al mostrar e indicar como renovable el origen de la electricidad que comercializan, sin indicar el porcentaje de la electricidad de origen renovable en el total de electricidad que venden.

Norma 11: “Las aseveraciones genéricas o no específicas sobre beneficios de tipo ambiental, en particular aseveraciones tales como “no dañino para el medio ambiente”, “verde”, “ecológico”, “sostenible”, deben evitase o justificarse mediante acotaciones.

Este tipo de adjetivos es muy común en los anuncios de productos de higiene personal y cosmética.

Norma 21: “Los argumentos ambientales sobre disposición de residuos son aceptables siempre y cuando el método recomendado de separación, recolección o procesamiento sea generalmente aceptado y fácilmente accesible para una mayoría de consumidores en el área de que se trate”.

¿Tienes en mente algún anuncio de café en cápsulas? En algunos se indica que se trata de material reciclable, pero no se concreta el método de separación adecuado para este tipo de residuo.

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